Canadá es un país espectacular y entre sus grandes atractivos están los Parques Nacionales de la Costa Oeste, Jasper y Banff, pertenecientes a las rocosas canadienses y declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El hilo conductor que une los parques de Jasper, situado al norte y Banff, al sur, es una carretera conocida como Icefields Parkaway o Campos de Hielo. Un trayecto ártico de una belleza que corta la respiración.

El entorno de las rocosas canadienses y los colores que desprende la naturaleza en sus distintas formaciones; lagos, glaciares, montañas, cascadas, cuevas, azules, grises, verdes, blancos constantes… hacen de esta parte de Canadá uno de los lugares más bonitos del planeta.

La fauna de esta zona, vive en un entorno prácticamente virgen y entre los animales destacados aparecen los caribúes, alces, lobos, osos negros y los fastuosos grizzli formando un escenario natural espectacular.

Jasper

Es el Parque Nacional más grande de Canadá y a su vez el menos transitado de las rocosas.

Son distintas rutas las que se pueden realizar para explorar el Parque Nacional Jasper.

Una de las visitas a realizar es el monte Robson. Con una altura de 3954 m. es el pico más alto de las rocosas canadienses.

El impresionante desfiladero de Cañón Maligne o el lago del mismo nombre. Con una coloración azul penetrante y un encanto indescriptible en el que podrás zambullirte a bordo de un crucero para admirar la belleza de las aguas del lago Maligne y el entorno que lo rodea. Bosques, montañas, glaciares y una visita a la pequeña Spirit Island. Icono canadiense.

Próximo a este lago está el lago Medicine. Un lago que según la temporada del año puede tener agua o que ésta haya desaparecido. Misterios de la naturaleza… El lago Medicine está unido al lago Maligne por el gran cañón Maligne, la garganta de mayor dimensión de Canadá.

Por la carretera Icefields Parkaway escucharás la virulencia de las aguas de la cascada Athabasca, la corpulencia del río y el glaciar Athabasca. Una enorme manta de 300 metros de grosor y más de 10.000 años de antigüedad situado al sur del Círculo Polar Ártico.

La mejor forma de recorrerlo es a bordo de un autobús especial montado con ruedas gigantes que le permiten circular sobre el hielo y acercarte hasta los pies del mismo glaciar.

Ya aproximándote al Parque Banff por la carretera de hielo, llegarás hasta el lago Peyto, de aguas turquesas y rodeado de permanentes picos blancos. El lago Bow y podrás admirar los glaciares que envuelven la carretera como el glaciar Pata de Cuervo.

Banff

Es el Parque Nacional más antiguo de Canadá y a su vez el más visitado. Una continuidad donde seguir descubriendo los tesoros naturales de las rocosas canadienses. Paraíso alpino de actividades, aventuras y vistas inspiradoras.

Es asombrosamente llamativo las distintas tonalidades de las aguas de sus lagos provenientes de los glaciares que rodean el parque.

Conforme te adentras en el parque nuevos lagos en enclaves mágicos.

Lago Louise, aguas de color turquesa protegidas por un muro de montañas, entre ellas la Montaña Victoria y su glaciar. El mejor punto de observación del fotogénico glaciar Victoria son las aguas de este lago.

Lago Moraine, rodeado por la simbólica imagen del valle de los 10 dientes y con vida limitada a la estación estival, cuando llega el deshielo de los glaciares y los picos se pueden mirar en las aguas del lago.

Lago Minnewanka o el intenso color del lago Esmeralda.

Una opción interesante para conocer todos estos lagos y su paleta de colores es sobrevolando sus aguas en una ruta en helicóptero de lo más maravillosa.